Son muchos los temas que desde el nacimiento preocupan a los padres y más adelante con la incorporación del niño al ámbito escolar a sus educadores.

La variedad de síntomas que pueden presentar los niños requieren atención. Pueden aparecer a cualquier edad, a veces muy tempranamente. No es suficiente con catalogarlos y dar una  respuesta estándar ya que estos demandan una estrategia terapéutica particular para cada caso; una escucha del niño y de sus padres y, en ocasiones, una colaboración con el entorno escolar: algunas de las  quejas más frecuentes son:  

Problemas de concentración y de atención

Problemas de aprendizaje

Enfermedades recurrentes

Problemas del sueño

Problemas de alimentación

Dificultades en el habla

Dificultades en la socialización

Dificultades en la adquisición de hábitos como el control esfinteriano

La adolescencia es una época que comienza después de importantes cambios físicos y psíquicos, del duelo vinculado con el final de la infancia y la dependencia parental. Con mucha frecuencia se producen manifestaciones de desequilibrio familiar y la aparición de síntomas variados como una manera de expresar el conflicto que subyace. 

La posibilidad de  realizar una consulta con profesionales psi para los jóvenes y  entrevistas de orientación a los padres es la vía para abrir los interrogantes que se generan. Algunos de los síntomas más frecuentes son por ejemplo: 

Inhibición en el aprendizaje

Conflictos en las relaciones familiares

Conflictos en las relaciones personales

Síntomas corporales

Problemas de inserción social

Problemas de la alimentación

Violencia, impulsividad, robos

Comportamientos autoagresivos e ideas de suicidio

Problemas con el consumo de drogas como el alcohol,marihuana etc.

Diagnosticar y utilizar psicofarmacos en la infancia y adolescencia es distinto  que en los adultos y por eso la consulta con el psiquiatra infantil es necesaria en algunas ocasiones.

Se mantiene en cambio el criterio de alcanzar un alivio sintomatico allí donde el sufrimiento del niño  impida los otros abordajes necesarios.

Lo que pretendemos con los Tests y escalas de medición es disponer de resultados orientativos sobre la capacidad del niño/adolescente de comprender el mundo que le rodea y los recursos que posee para enfrentarse con sus exigencias y desafios

Hay diferentes técnicas y pruebas para la evaluación en niños y adolescentes que brindan información tanto en el ambito psicopatologico como en el psicopedagógico. Pueden aportarnos datos en comparación con el desarrollo esperado a cada edad (aspectos evolutivos en cognición, lenguaje, sociabilidad). Resultan de utilidad en diversos momentos: cuando se necesita una valoración de capacidades (inteligencia general y/o aptitudes especificas), ante dificultades de aprendizaje o rendimiento escolar, como ayuda en la toma de decisiones ante posibles intereses profesionales-vocacionales, como datos complementarios en tratamientos clínicos o en diagnósticos de otros profesionales.